miércoles, 30 de enero de 2019

CRÍTICA

El último merovingio/ Jim Hougan
Esta novela se publicó originalmente en 2004 en pleno auge de los thrillers religiosos y de las conspiranoias producido por el apabullante éxito de "El código Da Vinci" de Dan Brown.
Nos encontramos pues ante una novela en formato best-seller lo cual implica una prosa sencilla y funcional, un ritmo narrativo ágil y una trama en la que predomina la acción y la intriga.
A priori, el argumento puede parecer atractivo; Jack Dunphy, un agente de la CIA destinado en Londres está llevando a cabo unas escuchas telefónicas a un prestigioso profesor universitario y, al poco tiempo, éste aparece brutalmente asesinado y mutilado. A partir de ese momento, Dunphy es apartado de sus funciones y relegado a hacer trabajo burocrático, sin recibir ninguna explicación al respecto, lo cual le hace sospechar que algo extraño está ocurriendo y empieza una investigación paralela por su cuenta, lo que le lleva a descubrir una conspiración al más alta nivel para que una antigua dinastía de reyes, descendientes directos de Jesucristo, tomen el poder en el mundo.
Dejando de lado la credibilidad que un argumento de este tipo pueda tener, que es muy discutible, lo que puedo constatar es que la trama va perdiendo fuerza a medida que se va desarrollando y que finaliza de una forma algo desangelada, dejando abiertas muchas de las incógnitas que se plantean durante la obra.
El autor, Jim Hougan (Nueva York,1942) es un reputado periodista de investigación y productor de documentales que se ha especializado en este tipo de narrativa pero, sinceramente, creo que esta es una novela fallida en el sentido de que no aporta nada nuevo al género y tampoco destaca por su calidad.
Se trata simplemente de un entretenimiento que se deja leer de forma agradable pero no deja ninguna huella en el lector.