domingo, 20 de diciembre de 2020

CRÍTICA

 La abadía de los crímenes/ Antonio Gómez Rufo

Hace un tiempo leí La leyenda del falso traidor de este autor (publiqué la crítica en este mismo blog), de la que guardo un grato recuerdo y ahora he leído esta novela también enmarcada dentro del género de la novela histórica, aunque en este caso con un toque de intriga criminal.

En la contraportada del libro, después de la sinopsis, la editorial establece una comparación entre esta novela y El nombre de la rosa de Umberto Eco, atendiendo a sus similitudes argumentales basadas en una serie de crímenes a resolver en un convento en plena Edad Media, en este caso en Cataluña, pero las afinidades entre las dos novelas terminan ahí, y cualquier comparación entre ellas me parece  totalmente fuera de lugar. La ambición de Umberto Eco al escribir su obra y su complejidad, tanto argumental como estructural, hacen palidecer a sus posibles imitadores y esta novela no es una excepción.

El espacio temporal en el que se desarrolla  la historia  son cuatro días, por lo que la novela se divide en cuatro partes, una por cada jornada. A parte de esto, hay dos aciertos que me parecen destacables en la novela: el primero es el personaje de Constanza, la monja navarra que ejerce de detective, que es una mujer de aguda inteligencia, bonachona, con un sentido del humor muy socarrón, que comparte protagonismo con el rey Jaime I durante toda la narración. El segundo es el duelo de caracteres que se produce entre el rey y la reina Leonor, repudiada por éste, que ve como una adolescente Violante de Hungría, que forma parte de su cortejo, le roba el amor del monarca ante sus propias narices utilizando de forma manipuladora su supuesta ingenuidad y su inocencia.

Por contra, la supuesta trama criminal de la novela es de una simplicidad tan burda que hará sonrojar a cualquier aficionado a la novela negra, y el tramo final  del libro desprende un tufo anticatalán mal disimulado que, en mi opinión, empaña el desarrollo anterior de la novela. Debo reconocer, sin embargo, que se trata de un libro entretenido
y de ágil lectura.