martes, 28 de diciembre de 2021

NOTICIAS

 Mi nueva novela ya tiene fecha de presentación. Me haría ilusión que compartierais conmigo este día tan especial.

jueves, 16 de diciembre de 2021

CRÍTICA

 

La historiadora/ Elizabeth Kostova

La publicación de La historiadora vino precedida en Europa de una gran expectación debido al gran éxito que había cosechado en Estados Unidos, y al hecho de que la editorial Little, Brown and Company abonó a Elizabeth Kostova (New London, Connecticut,1964) uno de los adelantos más grandes pagados a una autora novel, sin obra publicada.

La premisa de la novela es interesante, a priori: Bartholomew Rossi, un profesor de historia, empieza a estudiar las leyendas asociadas a la figura histórica de Vlad Tepes, “El Empalador”, que fue el inspirador del personaje de Drácula creado por Bram Stoker y poco tiempo después desaparece sin dejar rastro. Paul, su alumno más aventajado empieza a investigar por su cuenta, visitando bibliotecas y monasterios alrededor de Europa y de Asia Menor y se da cuenta de que algo muy extraño está pasando.¿Podría ser que Drácula estuviera vivo todavía cinco siglos después de su teórica muerte? Unos años más tarde Paul también desaparece y es su hija, también estudiante de historia, la que intenta averiguar qué hay detrás de todas esas misteriosas leyendas sobre el vampirismo.

En el aspecto estilístico, esta novela no solo no es innovadora o atrevida sino que está escrita en una prosa bastante pobre, con una adjetivación en la que abundan los tópicos y que demuestra un dominio del lenguaje poco trabajado por parte de la autora.

Las dos grandes virtudes de esta novela, en mi opinión, son el argumento, que supone una nueva re
visión del mito del vampiro, yendo a buscar sus raíces históricas, y la estructura narrativa, cuya historia está ambientada en tres épocas diferentes -1930,1954 y 1973-, con la dificultad que ello conlleva y que creo que está resuelto de manera satisfactoria.

Hay que reconocer que si Elizabeth Kostova muestra alguna habilidad notable como narradora, es que mantiene la tensión narrativa durante toda la novela, que supera las 650 páginas, lo cual no es nada fácil. Por contra, pese a ser una novela tan extensa, creo que el final, paradójicamente, es un poco abrupto, teniendo en cuenta el desarrollo de la historia. El desenlace final me parece un poco precipitado y ciertamente ingenuo comparado con el largo y compleja exposición de la novela.