CRÍTICA

El ángel Esmeralda/ Don DeLillo El lector avezado ya sabrá que Don DeLillo es uno de los autores más respetados y prestigiosos de las literatura norteamericana de los últimos treinta años, y al mismo lector no se le escapará el hecho de que la obra de DeLillo es, principalmente, novelística. Es cierto que este autor se ha prodigado poco en el relato corto y es por eso que los nueve cuentos que aparecen en este volumen son toda su obra breve al completo. Éste, como la mayoría de libros de DeLillo, no es de lectura fácil. Requiere un esfuerzo de concentración por parte del lector ya que su prosa es compleja y admite varios niveles de comprensión. El autor es un maestro en la sugestión de situaciones y ambientes, y sus descripciones, por originales en el uso de las palabras, no suelen dejar indiferente al lector. El libro está dividido en tres partes según la época en que los textos fueron escritos y creo que esto es un gran acierto porque permite comprobar cómo ha ido evolucionando el arte de este autor con los años. Aunque todos los relatos incluidos en este volumen son brillantes, yo me inclino por los que muestran a un DeLillo más realista y menos dado al simbolismo (Creación, El ángel esmeralda, El corredor) , si bien es cierto, como ya hemos comentado antes, que todos sus cuentos tienen cierto grado de metáfora vital. Una vez terminada la lectura de estos relatos, sigo pensando que DeLillo es mejor novelista que cuentista pero este libro no deja de ser una pequeña muestra de su maestría literaria.